¡Buenos días, navegantes de mis entretelas!
Lo primero que os quiero decir es que no quiero que penséis
que soy una chulita, creída, presuntuosa, vanidosa, etc...
Pero es que ha coincidido que me han llegado
dos nuevos libros con muy poco margen de tiempo.
Como no quería parecer abusona he dejado a Cocorina
unos días en la nevera, pero esta mañana la pobrecita me ha dicho:
- ¡Momo, déjate de tonterías y prueba, de una santísima vez,
lo que estoy cocinando en el puchero!
¡¡Y... ay diosmiíto!!
Cuando lo he probado estaba tan, pero tan rico,
que le he dicho a Cocorina:
-¡Anda, sal de ahí bonita mía,
que me dejo de complejos tontos por un rato!
Sal y enseñemos a tod@s tus admiradores
lo rico que ha quedado tu nuevo cuento.
-Ay, Momo es que ya tenía frío y tantas ganas
de que presumieras un poquitito de mí...
-Lo sé, lo sé... Sólo hacía un poco de tiempo- La he dicho
mientras acariciaba sus plumas suaves y blanquitas
y... sí, para que os voy a mentir, frías, muy frías.
¿Sabes Cocorina? Tengo un regalito para ti y para los navegantes.
También lo estaba reservando. Me lo mandaron
A ver si esto te hace entrar en calor:
Pues, voilà!
Ya esta en papel y pronto en las librerías
Gracias, Mar Pavón por escribir tan bien y bonito.
Espero que os guste querid@s navegantes.
Prometo, que ya no presumo más. Ay...