La vuelta.

¡Síiiiiiiiiiiiii!

¡Por fín!

¡Buenos días navegantes de mis entretelas!

(A partir de ahora leer 

con tono "presentador de circo") .

¡Navegantes, siéntense cómodos, 

enciendan sus computadoras 

o cualquier aparato que les permita 

navegar por el ciberespacio!

(no hace falta que se abrochen ningún cinturón 

pues esto no comporta ningún peligro). 

¡Sírvanse un té, café, refresco 

o lo que les apetezca y dispónganse a disfrutar!

Porque parece ser que, por fin, la señorita Momo, 

ilustradora entregada con amor y frenesí a su profesión.

Mujer pizpireta, dicharachera donde las haya.

Madre, esposa, ciudadana ejemplar,

amiga de sus amigos, amante de la naturaleza 

y de los animales...

 ¡Vuelve a ilustrarnos las mañanas!

¡Se acabaron estos paréntesis interminables,

estas semanas de sequía,

los días anodinos!

La señorita Momo vuelve a estar con todos ustedes 

más contenta que unas castañuelas.

Y hasta aquí puedo leer,

pero les puedo adelantar que viene 

cargada de nuevos proyectos, 

de mucho que enseñarles, mucho que contarles.

¡Compartan con sus amigos y seres queridos 

esta buena nueva pues la ilustradora promete 

un año de lo más extraordinario!

¡Se les quiere!